Los amantes de la escatología más olorosa no deberían perderse el poema, naturalista hímnico y coral, que Lizano dedica a la mierda:

Mierda, yo te saludo complacido 
cuando sales patética y caliente 
luego de abandonar en el crujiente 
y alimentado cuerpo tu sentido. 

m’agradarà que em facis arribar els teus comentaris, gràcies!!!!

Comparte y comenta esta entrada: