En 1982 Sprinkle se dirige a sí misma en “Deep Inside Annie Sprinkle”, una obra experimental que introduce al espectador en un viaje de deconstrucción del fetiche y arroja una mirada nueva -revolucionaria- sobre el concepto de estrella del porno. En ella una Sprinkle de 26 años mantiene relaciones sexuales con diferentes hombres en un cine X en el que se proyecta uno de sus films, mientras otra Sprinkle de 40 años habla directamente a la cámara sobre su vida sexual y personal.